El lesco del desempleo

Ronny con sus dedos hizo el movimiento de unas tijeras. No estábamos jugando piedra, papel o tijera 1,2,3… Este hombre sordo y mudo de 33 años fue despedido de su trabajo como constructor hace unas dos semanas.

Él llevaba entre sus manos un fólder dentro una bolsa plática, ahí están sus años de experiencia, recomendaciones y los lugares donde ha trabajado. Me contó que va a buscar trabajo donde sea,
¡ necesita plata, hace tres meses que nació su bebé!


Conversando con Ronny en el bus pensé, ¿cómo haría para hablar en una entrevista de trabajo de mis habilidades, sino tengo voz? ¿La gente confiaría en la buena fe de lo que dice unas hojas llamadas currículum? ¿Cuántas empresas les brindan la oportunidad de un trabajo digno a las personas con discapacidad? Son dudas que afloran ante la devorado y temible crisis.


Ronny sabe hacer de todo: solda, pega cerámica, pintar, en fin es todo un MCGuver de la construcción.

En noviembre del 2008 los despidos en la construcción ascienden los 4800 en noviembre del 2008, de acuerdo a las cifras de la Cámara de Industrias de Costa Rica y con base en las estadísticas de la CCSS.

Veinte compañeros más y Ronny fueron despedidos en una construcción en Santa Ana. Este sector de la economía costarricense está paralizado.

Le dije que buscara por todas partes y que no se cansara de caminar, Dios aprieta pero no ahorca.

No, no lo digo de la boca para afuera... No hay desesperación y asfixia más envolvente que no tener trabajo y las malas caras de la familia diciendo “y que busque trabajo en lo que sea”

Al llegar a la casa en la noche vi a Ronny por el barrio. Me dijo que no le fue muy bien y que mañana seguirá buscando. Eso sí la sonrisa no la pierde, sabe que en su casa lo espera su bebé. Esa pequeña niña que no le reclama nada, porque al igual que su padre no puede hablar.